null Aigües de Barcelona y el Ayuntamiento de Cornellà renuevan la alianza para no dejar a nadie atrás

Rubén Ruiz, director general de Aigües de Barcelona, y Antonio Balmón, alcalde de Cornellà de Llobregat, han firmado hoy la renovación del protocolo para afrontar la emergencia en el ámbito de la pobreza energética, que da continuidad al firmado en marzo de 2017. El objetivo del protocolo es fijar el procedimiento para garantizar el suministro de agua a quien no lo pueda pagar por falta de recursos económicos, en aplicación de la Ley 24/2015, de medidas urgentes para afrontar la emergencia en el ámbito de la vivienda y la pobreza energética.

El protocolo se suma a las medidas puestas en marcha unilateralmente desde 2012 por Aigües de Barcelona para no cortar el agua a nadie que no la pueda pagar. Además de garantizar el agua, la compañía dispone de un Fondo de Solidaridad para ayudar a pagar el consumo de agua a las familias con dificultades. Este fondo, que se gestiona en coordinación con los servicios sociales de los municipios del área metropolitana provistos por Aigües de Barcelona, ya ha bonificado la factura del agua a más de 44.000 familias en situación de vulnerabilidad, con una inversión superior a los 19 millones de euros. En Cornellà de Llobregat, se han otorgado ayudas a más de 1.600 familias, a las que se han destinado más de 900.000 euros.

El encuentro ha servido también para dar inicio al proyecto ONA (de la sigla en catalán para Empleo, Necesidades Básicas y Empoderamiento), que impulsa Aigües de Barcelona, junto con Cruz Roja y Tándem Social, desde su voluntad para contribuir a la recuperación económica y social y en su compromiso con las personas en riesgo de vulnerabilidad. La iniciativa tiene como objetivo empoderar a las personas beneficiarias del Fondo de Solidaridad, con un programa innovador y transformador, de dos años de duración, que combina la cobertura estable de las necesidades básicas con un programa específico de mejora de la empleabilidad y el desarrollo de competencias.

Un total de 38 personas acogidas al Fondo de Solidaridad participan actualmente en la prueba piloto del proyecto ONA, con el que se quiere desarrollar una metodología que se pueda replicar en otros territorios, así como mejorar el análisis de la vulnerabilidad y el diseño de itinerarios de transformación social a través del empleo.

El protocolo para afrontar la emergencia en el ámbito de la pobreza energética ya se ha firmado con los 23 consistorios metropolitanos donde Aigües de Barcelona está presente: además de Cornellà, Sant Adrià de Besòs, Begues, Esplugues, Sant Joan Despí, Sant Climent, El Papiol, Santa Coloma de Cervelló, Torrelles, Montcada i Reixac, Castelldefels, Viladecans, Sant Feliu, Sant Just, Montgat, Gavà, Pallejà, Santa Coloma de Gramenet, Sant Boi, L’Hospitalet, Badalona, Barcelona y Cerdanyola. Este protocolo pone de manifiesto el compromiso de la compañía con la ciudadanía, y en este caso en concreto, con las familias en situación de vulnerabilidad.