Actualidad

La Junta General Ordinaria de Accionistas ha aprobado hoy las cuentas y la gestión correspondientes al ejercicio de 2021 de Aigües de Barcelona, Empresa Metropolitana de Gestió del Cicle Integral de l’Aigua, S.A. Ante la situación de gran complejidad provocada por la pandemia, Aigües de Barcelona ha resuelto con éxito un nuevo año de difícil gestión con un doble objetivo: garantizar la continuidad del servicio con la misma calidad de siempre y preservar la seguridad y salud de la plantilla. Esto ha sido posible gracias al compromiso y dedicación de los 1.122 trabajadores y trabajadoras de Aigües de Barcelona, que han recibido el agradecimiento por parte de la compañía. La compañía ha mostrado, también, su preocupación por la escasez hídrica permanente, situación agravada en una cuenca mediterránea que sufre un gran estrés hídrico.

El beneficio total de la compañía ha sido de 4,9 millones de euros, un resultado que sigue condicionado por el impacto de la crisis sanitaria provocada por la covid-19, en comparación con los 22,2 millones de euros del ejercicio de 2019, el año anterior al estallido de la pandemia. Como medida de prudencia financiera, Aigües de Barcelona ha decidido no repartir dividendos este ejercicio entre los tres accionistas: la Sociedad General de Aguas de Barcelona (SGAB), CriteriaCaixa y el Área Metropolitana de Barcelona (AMB). Por otro lado, en la factura del agua se han recaudado 318 millones de euros de impuestos ajenos al suministro de agua y se han soportado 46 millones de euros adicionales relacionados con el servicio de agua. 

El impacto total de la actividad de Aigües de Barcelona, directa e indirecta, fue de 672,26 millones de euros, de los cuales 557,68 millones se generaron en Cataluña, y de estos, 511,25 millones en el área metropolitana. Esta actividad de la compañía supone la generación del 0,23% del producto interior bruto (PIB) de Cataluña. Así lo recoge el Informe sobre el Valor Social Integrado (VSI) de la compañía, elaborado por la consultora Valora. Del mismo modo, Aigües de Barcelona ha generado el equivalente a un total de 7.288 puestos de trabajo a tiempo completo en España, un 13% más que en 2020, de los cuales 6.191 fueron en Cataluña y 5.861 en el área metropolitana de Barcelona, un 18% más que en 2020.

Adicionalmente, se ha puesto en valor la repercusión que la actividad de la compañía tiene en el entorno más próximo y su apuesta por una contratación local y responsable. En este sentido, hay que tener en cuenta que, de los 1.312 proveedores totales, el 98,1% son nacionales y el 71,11% son locales y pertenecen a la provincia de Barcelona. La compañía ha fijado su financiación a partir de criterios ESG —ambientales, sociales y de gobernanza— y ha definido su propia matriz ESG en base a las recomendaciones que hacen los organismos internacionales más relevantes.

Compromiso con los que más lo necesitan
En la Junta General Ordinaria de Accionistas, también se han repasado las medidas sociales de la compañía, como la puesta en marcha de la nueva tarifa social, que recoge el compromiso histórico de la compañía para garantizar el agua a quien más lo necesita, plasmado a partir de 2012 con el Fondo de Solidaridad, una iniciativa pionera que se avanzó a la legislación vigente existente. Este fondo bonificó la factura del agua a más de 46.000 familias en situación de vulnerabilidad, con una inversión superior a los 20 millones de euros, hasta su conversión el año pasado en la nueva tarifa social, lo que supone un reconocimiento por parte de la administración del compromiso social de Aigües de Barcelona. En 2021 la tarifa social del agua benefició a más de 53.000 hogares, entre pensionistas, personas en el paro y personas en situación de vulnerabilidad, lo que supone 4,9 millones de euros bonificados.

Quedando cubierta la asequibilidad del recibo del agua para quienes más lo necesitan, Aigües de Barcelona ha continuado invirtiendo esfuerzos en dar oportunidades a estas personas con el impulso de programas de empleo y empleabilidad. Destaca, por ejemplo, el programa ONA (la sigla en catalán de Empleo, Necesidades básicas y Empoderamiento), en colaboración con Cruz Roja, con el objetivo de empoderar a las personas beneficiarias de la tarifa social con un programa innovador y transformador, de dos años, que combina la cobertura de las necesidades básicas de la persona con un programa específico de mejora de la empleabilidad y desarrollo de sus competencias. En el programa ONA participan 237 personas en situación de vulnerabilidad. La prueba piloto de Barcelona obtuvo una ratio de finalización del 86% y el 55% de las personas que lo finalizaron consiguieron un contrato laboral. Además, Aigües de Barcelona tiene firmados convenios contra la pobreza energética con los 23 municipios en los que opera, para garantizar el agua a las personas que no la pueden pagar.