Central Alturas

La Central Alturas, actualmente en funcionamiento, fue construida en 1886 como respuesta al constante crecimiento de Barcelona tras la aprobación del Plan Cerdà. 

Su función original era elevar el agua desde los depósitos de Dosrius, situados a 93 metros de altura, hasta los depósitos Alturas, situados a 200 metros en medio del Turó de la Rovira. Esta elevación de agua permitió abastecer a zonas más altas de la ciudad que tuvieron un fuerte desarrollo urbanístico durante el siglo XX.

Inicialmente funcionaba a partir de la fuerza del vapor que movía unas potentes bombas. En los años 30 del siglo XX empezaron a funcionar con energía eléctrica.