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La carrera transcurrió por 10 kms de la ciudad de Barcelona donde había 3 puntos de avituallamiento de agua
La Carrera de la Mercè, que tuvo lugar ayer 29 de septiembre, ha sido una de las más exitosas, y sostenibles que se recuerdan. En total, más de 12.000 participantes -600 más que el año pasado- han completado los 10 kms de la carrera, que ha transcurrido por alguna de las calles más emblemáticas de la ciudad.
Además, este año, la carrera ha sido la más sostenible que se ha organizado hasta el momento, ya que se han sustituido las habituales botellas de agua de plástico destinadas a los corredores y corredoras, por vasos de papel completamente biodegradables. En total, más de 40.000 vasos esperaban los inscritos perfectamente alineados en los tres puntos de avituallamiento instalados. Además, se podían llenar botellas y cantimploras, gracias a las fuentes públicas instaladas para la ocasión por Aguas de Barcelona.
Preparados por los voluntarios de la carrera, los vasos, con la inscripción “Solo hay una meta: salvar el planeta, bebe agua del grifo”, animaban los participantes a hacer un pequeño gesto en favor de la sostenibilidad. El agua de boca de la ciudad de Barcelona dispone de la certificación ISO 22.000, que asegura su calidad alimentaria. Aguas de Barcelona repartió, además, 400 cantimploras para el voluntariado de la carrera.
La Carrera de la Mercè destina el precio de su inscripción a varias entidades y tiene el apoyo de entidades no gubernamentales como Unicef, Unesco y Movimiento por la Pau, entre otros.
