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Aigües de Barcelona, en colaboración con Cetaqua, el Centro Tecnológico del Agua, ha calculado la huella de carbono y la huella hídrica de la edición de este año del Trofeo Conde de Godó, celebrado del 15 al 23 de abril en la ciudad de Barcelona.

A partir de estos dos cálculos, Aigües de Barcelona y el Real Club de Tenis Barcelona han definido un plan de sostenibilidad enfocado a reducir el impacto ambiental del torneo que incluye como principales ejes de acción: la gestión circular de los recursos, la transición energética, la movilidad sostenible y la implicación ciudadana, entre otros.

Reducción de la huella de carbono respecto al 2022

La huella de carbono específica por asistente al torneo se ha reducido en un 10% respecto al año pasado. Este año el torneo ha contado con un 15% más de asistentes (101.000 asistentes frente a los 88.091 del 2022). Sin embargo, las emisiones absolutas sólo han aumentado un 3,12% respecto al año anterior.

Compromiso para reducir el impacto hídrico

Para reafirmar su compromiso para la reducción del impacto hídrico local, el Real Club de Tenis de Barcelona ha impulsado un proyecto de regeneración y reutilización interna de las aguas grises generadas en el club. El agua regenerada producida se usará en el riego de las pistas de juego y zonas verdes del club. Esta acción permitirá reducir un 26% la huella hídrica directa del torneo, una vez implantado el proyecto que ya se encuentra en fase de obra.

La colaboración de Aigües de Barcelona en este evento deportivo de gran relevancia para la ciudad se enmarca en la voluntad de la compañía de convertirse en motor de la transformación ecológica, social y digital.